lunes, 14 de noviembre de 2016

Embiid: ¿El futuro Olajuwon?

Las comparaciones con Olajuwon no se hicieron esperar


Luego de dos temporadas lesionado por una fractura por estrés en el pie, finalmente debuto en la mejor liga del mundo el nigeriano Joel Embiid, un gigante de 2.18 mts que nos empezó a maravillar con su versatilidad, su movimiento de pies y su lanzamiento de 3  puntos de 90°.

Los Philadelphia 76ers lo llevan de a poco, no quieren que vuelva a lesionarse y se vea comprometida su carrera otra vez. Tiene una media de 20 minutos por partido y de seguro los minutos se le irán sumando paulatinamente conforme vaya avanzando la temporada( esta restricción se revisara en navidad). Los 76ers no quieren más problemas con el gigante, con quien ya apostaron bastante al elegirlo lesionado en el draft del 2014 en la tercera posición.

Podríamos decir que el baloncesto en la vida de este habilidoso pívot se dio de casualidad, al ser descubierto por su compatriota y mentor Luc Mbha a Moute (jugador de los Clippers de Los Ángeles)en su campus en Camerún , el se dedicaba hasta ese momento al futbol y al vóley soñando con ser profesional en este ultimo deporte. Luego de  ser convencido por el compañero de Cris Paul de que vaya a jugar a los Estados Unidos al básquet, asistir a la universidad y tomarse seriamente el baloncesto, Joel se convirtió en uno de los proyectos de estrella de la NBA.

Me animaría a decir que si las lesiones no lo aquejan Embiid será el novato del año (esto sin aun haber debutado su compañero el australiano Simmons), tiene todo carisma y minutos en una franquicia en plena reconstrucción (por no decir constante). En este proceso de maduración y consolidación de este hombre nacido en Yaoundé será muy beneficioso la presencia de un base con experiencia y visión de cancha como lo es el español “Chacho” Rodríguez.

Sus números en esta, su primera temporada, son: 18.8 puntos, 6.8 rebotes, 1.3 asistencias, 2.3 tapones, un asombroso 58.3 % en tiros de tres y un 79.2 % de libres en tan solo 21 minutos de acción. Son números demasiado buenos para alguien que estuvo dos años sin jugar por lesiones, y si ampliamos sus minutos a 36 por noche estaría promediando arriba de los 30 puntos y los 10 rebotes! Algo fantástico para cualquier jugador y más para un novato.
 
Se nota sus ganas de mejorar y su apego al trabajo, de lo contrario, no habría podido volver de su lesión mejor que al momento de haber sido seleccionado.  Su ética de trabajo se demuestra en como Embiid pulió su mecanismo de tiro, en palabras de él, viendo lanzar a grandes tiradores blancos que según él, tienen la mejor técnica de tiro.

Quizás este jugador mas sus jóvenes compañeros (Noel, Simmons, Okafor..etc.), sumándole la sabia conducción del ya mencionado Rodríguez y algún tirador fiable que pueda conseguir quizás Philly pueda dejar por fin la mediocridad y de una buena vez empezar a ser un equipo de playoffs como históricamente lo fue.

Muchos ven en él (salvando las distancias) un parecido en los movimientos con su ídolo y coterráneo Hakeem “the dream” Olajuwon. Embiid idolatra al miembro del salón de la fama, pero aun es muy pronto para ver si llegara a un poco del nivel de uno de los grandes pívots de la historia, por lo pronto tendrá que mantenerse saludable y seguir mejorando sus cualidades, el recuerdo de Greg Oden es todavía demasiado próximo y no nos permite ilusionarnos con jugadores que han tenido lesiones tempranas en su carrera. Esperemos que Embiid no repita el caso y pueda ser todo lo que pensamos que puede ser.
 

 

 

 

 

 

 

Fuentes






 

 

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